Francisco Adorni, hermano del vocero presidencial, recibe un salario millonario en el gobierno de Milei
El ascenso de Francisco Adorni en el Ministerio de Defensa, con un salario que supera los 4 millones de pesos mensuales, genera controversia en medio de ajustes y recortes en otros sectores.
El gobierno de Javier Milei se encuentra nuevamente en el centro de la polémica tras revelarse que Francisco Adorni, hermano del vocero presidencial, ha experimentado un notable aumento salarial en el Ministerio de Defensa. Adorni, que comenzó el año con un salario de 820 mil pesos, ahora percibe casi 4 millones de pesos mensuales, tras ser ascendido a jefe de Auditoría Interna.
Este incremento del 420% ha generado indignación, especialmente en un contexto en el que el gobierno de Milei ha vetado aumentos a las jubilaciones mínimas y continúa con políticas de ajuste que afectan a gran parte de la población. La noticia, obtenida a través de un pedido de Acceso a la Información Pública, pone en tela de juicio el discurso anticasta de la administración libertaria.
El nombramiento y posterior ascenso de Francisco Adorni contradice el discurso oficial y subraya las crecientes diferencias salariales en el gobierno. Mientras que Adorni disfruta de su nuevo puesto con un salario millonario, los militares y el personal civil de inteligencia de las Fuerzas Armadas siguen enfrentando recortes y salarios que no alcanzan para cubrir sus necesidades básicas.
Además, la falta de recursos en el área de Defensa se hace cada vez más evidente, con un presupuesto que sigue a la baja y apenas permite cubrir los gastos operativos. La situación se agrava con la polémica intención del gobierno de involucrar a las Fuerzas Armadas en la Seguridad Interior, una medida que ha sido rechazada por la “familia militar”.
La decisión de nombrar a Francisco Adorni en un puesto tan elevado no solo destaca la contradicción en la narrativa gubernamental, sino que también refuerza el malestar en las Fuerzas Armadas, donde se espera un aumento presupuestario significativo para poder enfrentar las crecientes demandas del sector.
El caso de Adorni es solo uno de los muchos ejemplos que subrayan las inconsistencias del gobierno de Milei, que continúa aplicando medidas de ajuste mientras privilegia a un selecto grupo cercano al poder. La historia de Francisco Adorni podría ser la punta del iceberg en una administración que predica austeridad, pero que parece beneficiar a unos pocos.
Fuente: Con información de Página/12
