Deuda y liquidez: el Gobierno enfrenta tensiones tras una fuerte caída de depósitos en el BCRA
El pago de vencimientos de deuda redujo las reservas del Tesoro en el Banco Central en $1,43 billones, a pesar de una inyección de fondos previa. Crecen las dudas sobre la sostenibilidad del esquema monetario y el impacto en las tasas de interés.
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El drenaje de liquidez y las señales del Gobierno
Los depósitos del Tesoro en el Banco Central se redujeron a $5,05 billones el pasado viernes, tras el pago de vencimientos de deuda en pesos que no lograron ser renovados en la última licitación de la Secretaría de Finanzas. La caída, de $1,43 billones, refuerza la preocupación del mercado sobre el margen de maniobra del Gobierno para afrontar sus compromisos financieros sin alterar el equilibrio monetario.
Ante esta situación, el Ministerio de Economía había realizado un traspaso de $2,2 billones desde bancos comerciales hacia su cuenta en el BCRA el día previo al vencimiento, en un intento por mostrar solvencia. Sin embargo, este movimiento expuso que los fondos líquidos del Tesoro en bancos comerciales se redujeron significativamente, lo que podría condicionar futuras estrategias financieras.
Impacto en la estrategia monetaria y las tasas de interés
El drenaje de los depósitos en el BCRA afecta directamente al esquema monetario del Gobierno, que mantiene un tope estricto a la base monetaria amplia (BMA), definida en $47,7 billones desde julio de 2024. Este límite restringe la cantidad de pesos en la economía e incluye los depósitos del Gobierno en el Central y el stock de LEFI (letras del Tesoro utilizadas para absorber liquidez).
Analistas advierten que, si la cuenta del Tesoro sigue cayendo y el “rollover” de deuda en pesos se mantiene en niveles bajos, el equipo económico podría enfrentar presiones para flexibilizar su estrategia o asumir un mayor costo financiero con tasas de interés más elevadas.
“La última licitación de deuda mostró un ‘rollover’ del 78%, convalidando tasas por encima de la curva de mercado. Esto evidencia que el Gobierno enfrenta desafíos en un contexto de liquidez restringida, donde los bancos priorizan colocaciones en LEFI con tasas más atractivas”, detalló un informe de la consultora BAVSA.
¿Qué alternativas tiene el Gobierno?
A pesar del impacto inmediato en la cuenta del Tesoro, el Gobierno aún dispone de reservas de liquidez en bancos comerciales, aunque cada vez más reducidas. Estimaciones privadas sugieren que el Tesoro podría contar con entre $3 y $5 billones adicionales en depósitos fuera del BCRA, lo que le daría cierto margen de maniobra en futuras licitaciones.
Sin embargo, si el drenaje de liquidez continúa, el Gobierno enfrentará decisiones difíciles en los próximos meses:
- Flexibilizar la base monetaria amplia, permitiendo una mayor emisión para cubrir necesidades de financiamiento.
- Sostener el tope de la BMA, pero incentivando la dolarización de transacciones para reducir la demanda de pesos.
- Pagar tasas más altas en las licitaciones, lo que encarecería el costo de la deuda y podría afectar la actividad económica.
El equilibrio entre estas opciones será clave para determinar la sostenibilidad de la deuda en pesos y la estabilidad del programa financiero de Luis Caputo. Mientras tanto, el mercado sigue de cerca la evolución de los depósitos del Tesoro y la capacidad del Gobierno para sostener su esquema monetario sin generar mayores distorsiones en la economía.