El caso sobre el oro venezolano depositado en Reino Unido quedó listo para sentencia
La disputa judicial entre el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y el líder opositor Juan Guaidó sobre quién puede decidir el destino de 32 toneladas de oro venezolano depositadas en el Banco de Inglaterra quedó hoy lista para sentencia en la Corte Suprema británica.
“Se nos ha encomendado un exigente trabajo de examen. Nos llevará algún tiempo considerar todos los argumentos y emitir nuestro juicio”, afirmó el presidente del tribunal, Lord Robert Reed, en el tercer y último día de audiencias del caso de gran tecnicismo jurídico, basado en la interpretación de la ley, sin expertos ni testigos.
“No sabemos cuándo será la sentencia en esta fase, pero a menudo puede ser varios meses después de la celebración de la vista”, precisó a la agencia de noticias AFP una portavoz del tribunal.
Los magistrados escucharon en estos días al abogado del Ministerio británico de Relaciones Exteriores reafirmar que el gobierno del país europeo reconoce a Guaidó como presidente encargado de Venezuela “a todos los efectos”.
“Maduro, en cambio, no es reconocido a ningún efecto (…) ni respecto a sus actos en Venezuela ni respecto a sus actos en el plano internacional”, subrayó Sir James Eadie.
Por lo tanto, según los abogados del líder opositor, un tribunal inglés no tiene jurisdicción para cuestionar los nombramientos por él realizados, aunque estos hayan sido invalidados por la justicia de Venezuela.
Maduro acusó esta noche a la justicia británica y al sector de Guaidó de “robarle a Venezuela el oro” para dárselo a “un gobierno que no existe”.
“Más de 2.000 millones en oro, las barritas de oro depositadas en el Banco de Inglaterra, entonces dicen que le pertenecen a un gobierno que no existe en Venezuela, inventan un gobierno de la Narnia de la fantasía para robarnos las empresas, el dinero, las cuentas y para robarle a Venezuela el oro; piratería del siglo XXI”, dijo Maduro en un mensaje transmitido por la televisora estatal VTV.
Luego de que el parlamento -entonces con mayoría opositora- lo proclamara presidente encargado y de haber sido reconocido como tal por más de medio centenar de países, Guaidó nombró en julio de 2019 a su propia dirección paralela del Banco Central de Venezuela.
Estos nombramientos fueron inmediatamente invalidados por el Tribunal Supremo venezolano, leal a Maduro. Pero eso no le impidió dirigirse al Banco de Inglaterra afirmando ser el representante legítimo del país y pedirle que no entregase al Gobierno los lingotes, valorados en más de mil millones de dólares, que custodia en sus cámaras acorazadas.
Por su parte, los abogados del Gobierno bolivariano se esforzaron por persuadir a los jueces de que “este caso se refiere esencialmente a asuntos internos de Venezuela” donde el poder está en manos de Maduro.
El letrado Nicholas Vineall, que representa los intereses del presidente venezolano, se refirió a sentencias judiciales de casos de expropiación en la Unión Soviética y litigios de autoridad durante la Guerra Civil española, entre otros, para ilustrar y avalar sus argumentos.
Hace un año, un juez de lo mercantil de Londres impidió a la administración chavista acceder al oro, el que dice necesitar para combatir la pandemia de coronavirus.
Pero el tribunal de apelaciones inglés anuló esta decisión en octubre, considerando que el Ejecutivo de Boris Johnson podía reconocer “de facto” el poder de Maduro, con cuya administración sigue manteniendo relaciones diplomáticas.