24 noviembre, 2024
Inicio » Trump despeja dudas y afirma que si pierde en el Colegio Electoral, entregará la presidencia

Trump despeja dudas y afirma que si pierde en el Colegio Electoral, entregará la presidencia

Luego de apelar reiteradamente a denuncias de fraude electoral jamás probadas y, por el contrario, rechazadas por la justicia, el presidente de EEUU, Donald Trump, despejó hoy cualquier duda de que vaya a asumir una posición de rebeldía y aseguró que entregará el Gobierno como corresponde, si los delegados al Colegio Electoral le dan el triunfo a su adversario demócrata, Joe Biden.


“Ciertamente lo haré, y ustedes lo saben”, dijo Trump cuando se le preguntó si dejaría la Casa Blanca en caso de que el Colegio Electoral apoyara a Biden, reprodujo la agencia de noticias Sputnik.

La afirmación constituye la primera oportunidad en la que el jefe republicano admite claramente la posibilidad de que pueda perder en el Colegio Electoral tras una elección limpia, ya que hasta hoy reiteradamente aseguró que esos electores provendrían de votos amañados y fraudulentos.

De hecho, hace apenas 24 horas insistió otra vez sin pruebas y tras varios reveses en la justicia en que las elecciones que perdió fueron manipuladas, por lo que volvió a pedirle a sus seguidores “revertir” su resultado.

Sin embargo, esta noche admitió que aceptará el veredicto del Colegio Electoral, aunque también subrayó que sería un error que ese organismo votara por Biden. “Si lo hacen, cometerían un error”, dijo, y agregó que sería difícil para él reconocer eso.

“Somos como un país del tercer mundo”, agregó, hablando sobre la infraestructura de votación.

El lunes último Trump autorizó a la Administración de Servicios Generales a iniciar una transición formal a su rival demócrata, pero anunció que continuaría disputando la validez de las elecciones de noviembre.

Según proyecciones de los medios de comunicación y las revisiones del escrutinio en los estados más disputados, Biden ya cuenta con el apoyo de 306 electores, es decir 36 más que el mínimo de 270 que necesita un candidato para consagrarse presidente de Estados Unidos.