La intervención del organismo norteamericano, sumada a las ventas del BCRA y el Tesoro local, totaliza más de u$s5.000 millones en divisas volcadas al mercado en un mes. Expertos coinciden en que, sin este apoyo, el tipo de cambio habría alcanzado niveles críticos.
ECONOMIA, 25 de octubre de 2025 – En una movida de alto impacto, el Tesoro de Estados Unidos intervino con fuerza en el mercado cambiario argentino en la previa de las elecciones legislativas, con ventas estimadas entre u$s1.800 y u$s2.500 millones para contener una nueva corrida contra el peso. La operación, que comenzó el pasado 9 de octubre, formó parte de un masivo operativo de estabilización que superó los u$s5.000 millones en un solo mes al sumar las ventas del Banco Central y el Tesoro local.
Según estimaciones de consultoras privadas, el organismo norteamericano fue el principal aportante de divisas en este período, actuando para frenar la escalada del dólar en un contexto donde la demanda de activos dolarizados habría trepado a u$s27.000 millones en los últimos tres meses.
Un esfuerzo combinado para sostener la paridad
El operativo no fue en solitario. En paralelo a la asistencia externa, el Banco Central (BCRA) intervino en el mercado spot vendiendo aproximadamente u$s1.150 millones desde mediados de septiembre. A su vez, el Tesoro local habría aportado otros u$s2.100 millones. La suma total de esta intervención coordinada permite visualizar la magnitud del esfuerzo para sostener el tipo de cambio oficial.
Una calma frágil y advertencias para después de las elecciones
Los analistas coinciden en un punto crucial: sin esta asistencia externa sin precedentes, el tipo de cambio habría alcanzado “niveles críticos”. La intervención logró sostener momentáneamente la estabilidad cambiaria, con el dólar cotizando por encima de los $1.500.
Sin embargo, los especialistas advierten que la situación sigue siendo extremadamente frágil. La calma aparente se sostiene sobre intervenciones extraordinarias que, según las consultoras, podrían ser difíciles de mantener después de los comicios, poniendo en foco la capacidad del Gobierno de manejar la estabilidad cambiaria sin recurrir a nuevos salvatajes internacionales.